Curso de Inteligencia Artificial Aplicada a la Contratación Pública Ver más

¿Qué es el contrato mixto?

Ejecución Contratos

Vale, te lo suelto en cristiano: un contrato mixto, cuando hablamos de licitaciones públicas y movidas del sector público, es básicamente un Frankenstein legal. O sea, agarras dos o más tipos de contratos diferentes, los mezclas en uno solo, y ¡zas! tienes un contrato mixto. Esto pasa cuando una sola licitación te pide, por ejemplo, construir algo y al mismo tiempo proveer todo el material o los servicios para que funcione. Todo junto, todo revuelto.

Por ejemplo, imagina que te piden levantar un edificio (eso sería el típico contrato de obra) y encima tienes que meterle todo el equipamiento (contrato de suministro). Dos cosas distintas, pero te las ponen en el mismo paquete. Es como pedirte que cocines y que después friegues los platos, todo incluido en el mismo trato.

A nivel de palabras clave para SEO, no te rompas la cabeza: “contrato mixto”, “licitaciones públicas”, “contratación del sector público”, “contrato de obras”, “contrato de suministro”, “contrato de servicios”. Lo típico que buscaría alguien perdido en estos temas.

Legalmente, el rollo se pone más interesante. Las reglas no son iguales en todos lados. En la Unión Europea, por ejemplo, la Directiva 2014/24/UE dice que si el contrato parece ser de varios tipos a la vez, hay que mirar cuál es el componente principal y regirse por ese. Vamos, lo que más pese, manda.

Ahora, un consejo de amigo: si eres empresa y te lanzas a por un contrato mixto, ojo. Cada tipo de contrato dentro del “mix” tiene sus reglas, sus papeleos, sus dolores de cabeza. Antes de firmar nada, entérate bien de qué va cada parte y qué te están pidiendo exactamente. No te dejes llevar solo por la emoción de ganar la licitación.

Y que no se te olvide, estos contratos son un lío. Más complicados de manejar que los contratos de toda la vida, porque tienes que lidiar con varias cosas a la vez, cada una con sus historias. Así que igual te toca poner más gente a gestionar el asunto o buscar a alguien que sepa moverse en este terreno. No es para amateurs, te lo digo ya.

En resumen: el contrato mixto es una herramienta útil, sí, porque te da margen de maniobra y puedes hacer varias cosas en una sola jugada. Pero también puede ser un campo de minas si no sabes bien dónde te metes. Así que, si te va la marcha y tienes el equipo para ello, adelante. Si no, mejor piénsatelo dos veces.

Las oportunidades no ocurren, tú las creas.

Estás a solo un clic.

Para Licitadores

Encuentra más oportunidades de negocio

Empieza hoy
Para Instituciones Públicas

Optimiza tus procesos de contratación

Agendar reunión
  • Gratis
  • No se requiere tarjeta de crédito
  • Soporte 24/7
  • Alternativa a PLACE