Habla con un experto en contratación pública

¿Qué contratos suele licitar el sector defensa?

Ejecución Contratos

A ver, el sector defensa es, sin vueltas, uno de esos monstruos clave en la economía de cualquier país. No es solo por la pasta que mueve, sino porque estamos hablando de seguridad nacional, y eso ya es otro rollo. El tema de la contratación pública aquí es un mundo aparte—de esos con papeleo eterno y requisitos imposibles—pero, al final, es la vía para pillar desde tanques hasta el wifi de la base militar.

Los contratos más jugosos, obvio, son los de adquisición de equipo militar. Aquí entra de todo: tanques que parecen sacados de una peli, aviones que ni Top Gun, armas, radios, drones… Lo que sea. Y ojo, que no es solo comprar el cacharro, luego vienen contratos extra para arreglarlo, actualizarlo, o básicamente resucitarlo cuando algo falla (que suele pasar, porque nada es eterno).

Luego están los contratos para construir y mantener infraestructuras militares. Bases, almacenes, sitios para que los soldados hagan flexiones bajo la lluvia… Todo eso. Las constructoras ven estos contratos y se frotan las manos, porque suelen ser largos, llenos de ceros y bastante estables. ¿Quién no quiere asegurarse curro durante años?

Tampoco faltan los contratos de consultoría. Aquí las empresas venden humo estratégico, seguridad, formación, o soporte técnico. Vamos, que te asesoran sobre cómo no liarla parda. Y sí, también hay mucho dinerito en juego, sobre todo si pillas clientes grandes.

Y, claro, no podemos olvidar la parte tecnológica. El sector defensa tira de software, hardware y sistemas de información como si no hubiera un mañana. Ciberseguridad, redes, sistemas para espiar al vecino… Todo lo que suene a futuro, básicamente.

Eso sí, meterse en este tinglado no es como vender camisetas en el mercadillo. Hay un mar de regulaciones, leyes de contratos públicos, normas de seguridad nacional, y mil historias más. Las empresas tienen que demostrar que no solo pueden cumplir, sino que están a la altura de los estándares, que aquí no se andan con tonterías. Si no cumples, puerta. Así de sencillo.

En resumen: los contratos del sector defensa son variados, complejos y, si te los llevas, puedes dormir tranquilo con la cuenta bancaria. Pero ojo, que esto no es para cualquiera. Hace falta saber bien de qué va la cosa, experiencia, y muchas ganas de pelear con la burocracia y la competencia. Si no, mejor ni lo intentes.

Marta Jiménez

Marta Jiménez

Experta en contratación pública • Transformación digital de licitaciones • Formadora y autora en Tendios

Accede gratis a +2.000.000 licitaciones hoy mismo

Estás a solo un clic.

Para Licitadores

Encuentra más oportunidades de negocio

Empieza hoy
Para Instituciones Públicas

Optimiza tus procesos de contratación

Agendar reunión
  • Gratis
  • No se requiere tarjeta de crédito
  • Soporte 24/7
  • Alternativa a PLACE